Chlorella, Especial Para La EliminaciÓn De TÓxicos, Remedio curativo de apiterapia, acupuntura y naturopatía
ALTAMENTE RECOMENDADA DESPUÉS DE MEDICACIONES PROLONGADAS
Leopold Auerbach, neurólogo alemán, descubrió en el siglo XIX dos capas de células nerviosas muy próximas a un trozo de intestino que estaba diseccionando. Al observarlas al microscopio concluyó en que eran parte de una red compleja. Sin saberlo, fue el primero en observar al «segundo cerebro», como fue denominado en 1998.
La Chlorella es un alga microscópica unicelular de agua dulce, con abundantes nutrientes naturales y muy beneficiosa para la salud.
Existe en la Tierra desde hace más de 540 millones de años pero que ha mantenido su estructura genética prácticamente intacta hasta nuestros días.
Una razón por la cual esta alga ha podido sobrevivir durante todos esos millones de años es la extrema dureza de su membrana celular, capaz de aislar y proteger el material genético hallado en el interior de la célula. Otra razón es su habilidad reproductiva, una sola célula de chlorella puede reproducirse hasta por 4 cada 20 horas.
NUTRIENTES QUE APORTA
PROTEÍNAS: La chlorella posee proporcionalmente más proteína que la soja, el atún o la carne de vacuno.
Las proteínas se componen de aminoácidos, y de éstos la chlorella tiene 18 diferentes, incluyendo todos los llamados aminoácidos esenciales, lo que la convierte en una fuente de proteína completa y de alta calidad.
VITAMINAS: Contiene más de 20 tipos de vitaminas y minerales, entre los que destaca el betacaroteno (precursor de la vitamina A) y la vitamina B12, esta última de especial importancia para los vegetarianos. Además, también se encuentran en la chlorella las vitaminas C, D, E, K1, B2, B3, B6 y ácido fólico.
MINERALES: Respecto a los minerales, la chlorella es rica en calcio, magnesio, zinc, hierro, fósforo, potasio, manganeso y otros.
PROPIEDADES
Potencia el sistema inmune: Numerosos experimentos —principalmente en Japón y Estados Unidos— demuestran que la chlorella estimula la formación de células defensivas además de la producción de glóbulos rojos. En concreto favorece la producción de linfocitos T y B encargados de destruir bacterias, virus, hongos y otros microorganismos patógenos que pueden provocar enfermedades.
Protege contra los radicales libres: Además de comportarse directamente como un antioxidante y eliminar los radicales libres que podrían generar graves daños en el organismo el betacaroteno que contiene esta alga posee la capacidad de disipar la energía del oxígeno singular e impedir así que se generen más radicales libres.
Mejora el funcionamiento del aparato digestivo: La chlorella mejora la función estomacal y el peristaltismo intestinal —lo que ayuda a combatir el estreñimiento y la halitosis— y estimula el crecimiento en el intestino de bacterias aeróbicas benéficas promoviendo la salud de todo el organismo ya que las mismas combaten infecciones, neutralizan los efectos de sustancias tóxicas o potencialmente nocivas y fabrican parte de la vitamina B12 que nuestro cuerpo necesita.
Desintoxica el organismo: Además de estimular la formación de glóbulos rojos, tonifica la sangre, mejora la respiración, participar en el buen funcionamiento del sistema hormonal, acelera el proceso de curación de heridas y quemaduras, fortalece los dientes, elimina el sangrado de las encías y refuerza el sistema inmune.
El gran aporte de clorofila contribuye a la limpieza del intestino, a purificar la sangre y el hígado de forma muy efectiva.
Pero la mejor propiedad que posee es la de depurar y desintoxicar el cuerpo de metales pesados como el cadmio, el uranio, el mercurio o el plomo, pesticidas, herbicidas, quimioterápicos y radiaciones.
Además, se ha comprobado que aumenta la producción de glóbulos rojos —lo que beneficia a las personas con anemia— y ayuda al transporte de oxígeno a todos los tejidos del cuerpo, especialmente al cerebro.
Atenúa los síntomas de las reacciones alérgicas y fomenta el buen funcionamiento metabólico general.